qué ha sido de Wes Brown

Hay apellidos que resuenan con fuerza en la mente de los aficionados al fútbol. Algunos lograron brillar en grandes equipos y cosechar numerosos títulos. Sin embargo, hay otros que, a pesar de su talento, quedan un poco en la sombra, quizás porque no tienen aclamadas funciones en el campo.

Un buen ejemplo de esto es Wes Brown, un defensor clave del Manchester United durante la época de Alex Ferguson. Acompañado por estrellas como Cristiano Ronaldo, Wayne Rooney y Carlos Tevez, Brown vivió momentos de gloria, pero su fortuna se desvaneció por razones que todavía no están del todo claras.

A pesar de haber logrado un gran éxito, la historia de Wes es un recordatorio sobre las dificultades que pueden enfrentar incluso los deportistas más exitosos. Brown se unió a la academia del Manchester United en 1992, donde se formó como jugador. Su debut en el primer equipo ocurrió en 1998 y fue partícipe significativo de dos ciclos memorables: el triplete de 1999 y el nuevo gran éxito de 2008.

A lo largo de su carrera, contribuyó a un impresionante total de 20 títulos con los Red Devils, incluyendo siete Premier Leagues y dos UEFA Champions League, además de la Copa Intercontinental y el Mundial de Clubes. En total, Brown disputó 362 partidos y anotó cinco goles como defensa central.

Pero su historia no se limita a los logros en el campo. Se estima que, gracias a sus contratos, llegó a acumular una fortuna que alcanzaba los 60 millones de dólares. Sin embargo, luego de su retiro del fútbol en 2018, su situación dio un giro dramático. Wes nunca ha desglosado cómo perdió todo su dinero, pero se sospecha que decisiones financieras erradas y un costoso divorcio de su exesposa, Leanne Wassell, jugaron un papel crucial.

En 2023, Brown se declaró en bancarrota. Hoy en día, se dedica a educar a jóvenes futbolistas sobre la importancia de la educación financiera, intentando evitar que otros pasen por situaciones similares a las suyas. Además, trabaja con diversas marcas para poder mantenerse. Es un camino admirable y un recordatorio de que la vida después del fútbol puede presentar desafíos inesperados.